La ilustración muestra un durazno con piel aterciopelada y tonos que van desde el amarillo pálido hasta el rojo oscuro. La textura de la fruta es casi textil, con surcos y arrugas que parecen crear sombras y volúmenes en su superficie. Esta ilustración se incluye en la receta de Chiles en nogada como un elemento clave de su preparación, ya que los duraznos son un ingrediente esencial en esta receta tradicional mexicana.
Materiales: Rotuladores, técnica mixta.
Proyecto: La Cocina de Luchita.